La vida es como cuando a uno lo elegían para las obras del teatro de colegio. Ea, te tocó. Tú vas a hacer de don Perlimplín. No, oiga, que yo quiero hacer de angelito. Pues no. Te tocaba don Perlimplín y te aguantabas. Así es la vida. Te toca hacer de don Perlimplín, con o sin Belisa, cuando quieres ser el angelito, don Corleone, Vicente Ferrer, Robison Crusoe, tú mismo, o alguien diferente. Te tocó y te aguantas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario