En el fondo, los que nos dedicamos a la extranjería flipamos con estas cosas... Por cierto, yo le arreglé los papeles a Fidel Castro. Un Fidel Castro anticastrista; vaya personaje. Su padre era pro Castro y él es un absoluto anti. Un gusano, según la terminología ad hoc. Eso sí, un tipo con el que yo iría al fin del mundo; eso sí, con cuidado. Algún día, en otra galaxia, escribiré sobre él.
Cádiz, 31.05.2012. Agencias.- Hoy se ha vivido en la ciudad de Cádiz un inquietante suceso. El cubo de Rubik ha aparecido encajonado entre los malecones de la ciudad tras haber estado flotando durante un tiempo desconocido. Fuentes de la Junta de Andalucía han atribuido tan notorio suceso a las mareas producidas por las lunas, aunque no son capaces de explicar el por qué de su llegada a Cádiz; los 3000 años de historia de Cádiz algo tienen que ver, seguro. Fuentes de la Administración General del Estado consideran que esta eventualidad es consecuencia de la relación de ZP con el mundo comunista que gobierna determinadas partes del planeta, especialmente, Iberoamérica (o Latinoamérica, con mala baba)
En cualquier caso, a la población gaditana ha llamado la atención el mal aspecto, indudablemente producto del estrés, que presentaba el cubo. Por cierto, aparentemente, resuelto.
Por ahora vamos a dejarnos de más besos. Los besos transmiten bacilos, virus, bacterias, las heriditas de la frotación y el rozamiento, la mononucleosis, el herpes... Puaaggggggggggggggggggg! Darle un beso a la rana tenía que ser muy desagradable, aunque fueras la princesa. No te digo nada si fueras el príncipe.
Hoy he bajado al Sur. El sur que existe más que nunca, al menos en los medios de comunicación. Este sur que necesito respirar trece veces por minuto, parafraseando a Celaya.
Mañana es el almuerzo de despedida de mi Nati. Claro que le daré dos besos, incluso alguno más y, a ser posible, un achuchón.
Besos, el sur, Nati, el mar. Nadie me gana mañana, seguro.
Tomás Segovia fue un poeta valenciano, nacionalizado mejicano, que falleció hace unos meses en el DF. Como cabe deducir de estas breves palabras, fue la guerra (in)civil española la que lo condujo a México, alcanzando el carácter de referente del exilio en ese país.
Gracias a la labor de Aracne, que desde aquí agradezco, podemos conocer este bello poema, de cierta longitud, y en el que con un poco de observación e interés podemos descubrir, o a lo mejor sólo intuir, qué poetas, a su vez, le servían de referencia (o influencia, como se diría más suavemente) a él mismo.
Besos
Mis besos lloverán sobre tu boca oceánica primero uno a uno como una hilera de gruesas gotas anchas gotas dulces cuando empieza la lluvia que revientan como claveles de sombra luego de pronto todos juntos hundiéndose en tu gruta marina chorro de besos sordos entrando hasta tu fondo perdiéndose como un chorro en el mar en tu boca oceánica de oleaje caliente besos chafados blandos anchos como el peso de la plastilina besos oscuros como túneles de donde no se sale vivo deslumbrantes como el estallido de la fe sentidos como algo que te arrancan comunicantes como los vasos comunicantes besos penetrantes como la noche glacial en que todos nos abandonaron besaré tus mejillas tus pómulos de estatua de archilla adánica tu piel que cede bajo mis dedos para que yo modele un rostro de carne compacta idéntico al tuyo y besaré tus ojos más grandes que tú toda y que tú y yo juntos y la vida y la muerte del color de la tersura de mirada asombrosa como encontrarse en la calle con uno mismo como encontrarse delante de un abismo que nos obliga a decir quién somos tus ojos en cuyo fondo vives tú como en el fondo del bosque más claro del mundo tus ojos que tú no conoces que miran con un gran golpe aturdidor y me inmutan y me obligan a callar y a ponerme serio como si viera de pronto en una sola imagen toda la trágica indescifrable historia de la especie tus ojos de esfinge virginal de silencio que resplandece como el hielo tus ojos de caída durante mil años en el pozo del olvido besaré también tu cuello liso y vertiginoso como un tobogán inmóvil tu garganta donde la vida se anuda como un fruto que se puede morder tu garganta donde puede morderse la amargura y donde el sol en estado líquido circula por tu voz y tus venas como un cogñac ingrávido y cargado de electricidad
besaré tus hombros construidos y frágiles como la ciudad de Florencia y tus brazos firmes como un río caudal frescos como la maternidad rotundos como el momento de inspiración tus brazos redondos como la palabra de Roma amorosos a veces como el amor de las vacas por los terneros y tus manos lisas y buenas como cucharas de palo tus manos incitadoras como la fiebre o blandas como el regazo de la madre del asesino tus manos que apaciguan como saber que la bondad existe besaré tus pechos globos de ternura besaré sobre todo tus pechos más tibios que la convalescencia y que pesan en el hueco de mi mano como la evidencia en la mente del sabio tus pechos pesados fluidos tus pechos de mercurio solar tus pechos anchos como un paisaje escogido definitivamente inolvidables como el pedazo de tierra donde habrán de enterrarnos calientes como las ganas de vivir con pezones de milagro y dulces alfileres que son la punta donde de pronto acaba chatamente la fuerza de la vida y sus renovaciones tus pezones de botón para abrochar el paraíso de retoño del mundo que echa flores de puro júbilo tus pezones submarinos de sabor a frescura besaré mil veces tus pechos que pesan como imanes y cuando los aprieto se desparraman como el sol en los trigales tus pechos de luz materializada y de sangre dulcificada generosos como la alegría de aceptar la tristeza tus pechos en donde todo se resuelve donde acaba la guerra la duda la tortura y las ganas de morirse besaré tu vientre firme como el planeta Tierra tu vientre de llanura emergida del caos de playa rumorosa de almohada para la cabeza del rey después de entrar a saco tu vientre misterioso cuna de la noche desesperada remolino de la rendición y del deslumbrante suicidio donde la frente se rinde como una espada fulminada tu vientre montón de arena de oro palpitante montón de trigo negro cosechado en la luna montón de tenebroso humos incitante tu vientre regado por los ríos subterráneos donde aún palpitan las convulsiones del parto de la tierra
tu vientre contráctil que se endurece como un brusco recuerdo que se coagula y ondula como las colinas y palpita como las capas más profundas del mar océano tu vientre lleno de entrañas de temperatura insoportable tu vientre que ruge como un horno o que está tranquilo y pacificado como el pan tu vientre como la superficie de las olas lleno hasta los bordes de mar de fondo y de resacas lleno de irresistible vértigo delicioso como una caída en un ascensor desbocado interminable como el vicio y como él insensible tu vientre incalculadamente hermoso valle en medio de ti en medio del universo en medio de mi pensamiento en medio de mi beso auroral tu vientre plaza de todos partido de luz y sombra y donde la muerte trepida suave al tacto como la espalda del toro negro de la muerte tu vientre de muerte hecha fuente para beber la vida fuerte y clara besaré tus muslos de catedral de pinos paternales practicables como los postigos que se abren sobre lo desconocido tus muslos para ser acariciados como un recuerdo pensativo tensos como un arco que nunca se disparará tus muslos cuya línea representa la curva del curso de los tiempos besaré tus ingles donde anida la fragilidad de la existencia tus ingles regadas como los huertos mozárabes translúcidas y blancas como la vía láctea besaré tu sexo terrible oscuro como un signo que no puede nombrarse sin tartamudear como una cruz que marca el centro de los centros tu sexo de sal negra de flor nacida antes que el tiempo delicado y perverso como el interior de las caracolas más profundo que el color rojo tu sexo de dulce infierno vegetal emocionante como perder el sentido abierto como la semilla del mundo tu sexo de perdón para el culpable sollozante de disolución de la amargura y de mar hospitalario y de luz enterrada y de conocimiento de amor de lucha a muerte de girar de los astros de sobrecogimiento de hondura de viaje entre sueños de magia negra de anonadamiento de miel embrujada de pendiente suave como el encadenamiento de las ideas de crisol para fundir la vida y la muerte de galaxia en expansión tu sexo triángulo sagrado besaré besaré besaré hasta hacer que toda tú te enciendas como un farol de papel que flota locamente en la noche.
Pues sí, hoy es mi cumpleaños. Así que, amables lectoras y lectores de esta hojilla electrónica, sentíos abrazados, besados, queridos e invitados (especialmente esto último, que ya sabéis como está la economía)
un beso con lengua
nunca es un beso con lengua
es un beso de lengua contra lengua
de labio contra labio
es un salvaje encuentro
que ni siquiera reproduce un coito
una lucha entre dos lenguas
apéndices que pelean entre sí
porque se aman
como los cuerpos a los que pertenecen
Al veronés Gaius Valerius Catulo también le preocupaban los besos.
Carmen IV
Vivamus, mea Lesbia, atque amemus, rumoresque senum severiorum omnes unius aestimemus assis. soles occidere et redire possunt:
nobis, cum semel occidit brevis lux, nox est perpetua una dormienda. da mi basia mille, deinde centum, dein mille altera, dein secunda centum, deinde usque altera mille, deinde centum.
dein, cum milia multa fecerimus, conturbabimus illa, ne sciamus, aut nequis malus invidere possit, cum tantum sciat esse basiorum.
Y para los/las que fueron de ciencias, o simplemente desconocen el latín, una traducción. Eso sí, como suena en latín da mi basia mille....
Vivamos, querida Lesbia, y amémonos, y las habladurías de los viejos puritanos nos importen todas un bledo. Los soles pueden salir y ponerse;
nosotros, tan pronto acabe nuestra efímera vida, tendremos que vivir una noche sin fin. Dame mil besos, después cien, luego otros mil, luego otros cien, después hasta dos mil, después otra vez cien;
luego, cuando lleguemos a muchos miles, perderemos la cuenta para ignorarla y para que ningún malvado pueda dañarnos, cuando se entere del total de nuestros besos. (Traducción de A. Ramírez de Verger)
El algecireño José Luis Cano ha sido uno de los grandes estudiosos de la generación del 27. Como tal, no podía por menos que escribir bellos poemas, como éste, bastante oscular por cierto, que Aracne nos ha hecho llegar.
Noticia del beso
Nace el beso en la sangre y su fuego madura como el fruto de un árbol a la luz de la tarde. Ebrias alas secretas van naciendo a su paso y dorando los labios que esperan entreabiertos.
Gime la flor del beso antes de abrir su rosa, y sus pétalos arden melancólicamente mientras sube un rumor por la delgada sangre y se detiene al borde de la boca hechizada.
Ya los ojos no ven. Mientras escapa el mundo sólo el fruto del beso hunde su quemadura en el dorado éxtasis, y el nácar de unos labios dulcemente crepita en su abrasada llama.
Un brillo nuevo nace de la boca entreabierta, mientras redonda estalla la granada del beso, y el dulce labio herido, ardiente ola ceñida, su lentísima espuma destila prisionero.
No tiene edad el beso, pero su fruto muere cuando su llama de oro se deshace en los labios, cuando despierta el párpado de su ebriedad callada y el corazón se oculta para sorber su dicha.
Mas no muere su luz, su ardentísimo pozo puro como la nieve, hondo como el silencio. No muere lo que llega al fondo de la sangre donde el beso dejó un reguero de cielo.
Esta es una versión que yo no conocía del conocidísimo poema de José Agustín GoytisoloPalabras para Julia. Es una versión metalera interpretada por Los Suaves.
He decidido abrir una especie de sección en este blog dedicada a poemas sobre ósculos (sobre besos, para no quedar demasiado pedante). Me gustan los besos (como a cualquiera, supongo, siempre que vengan de la persona debida, claro)
Sin que sirva de precedente, pero en aras de la interactuación a la que alguna vez me he referido por aquí, si alguien conoce alguno que crea que merece la pena, está invitado a hacerlo llegar por la vía que estime más oportuna.
Ayer te besé en los labios. Te besé en los labios. Densos, rojos. Fue un beso tan corto, que duró más que un relámpago, que un milagro, más. El tiempo después de dártelo no lo quise para nada ya, para nada lo había querido antes. Se empezó, se acabó en él.
Hoy estoy besando un beso; estoy solo con mis labios. Los pongo no en tu boca, no, ya no... -¿Adónde se me ha escapado?-. Los pongo en el beso que te di ayer, en las bocas juntas del beso que se besaron. Y dura este beso más que el silencio, que la luz. Porque ya no es una carne ni una boca lo que beso, que se escapa, que me huye. No. Te estoy besando más lejos.
Me
había dicho que vendría; es más, yo le había propuesto en
múltiples ocasiones que viniera. Incluso alguna vez, con la boca
pequeña, le había dicho que yo iría. Son sólo 1500 kilómetros de
distancia.
Pero
al final, ella vino. Y vimos exposiciones, y comimos en restaurantes,
y tomamos copas en bares, y anduvimos cogidos de la mano de aséptica
manera, y veíamos que la gente sonreía en un día soleado.
Paseamos,
elucubramos, discernimos, nos aturrullamos, nos enternecimos.
Al
final, intenté ser honrado. Le dije que podíamos cenar en mi casa.
Comprar algo en la calle, tomar algún vino más, echar unas risas.
Sí. Unas risas.
A
las dos horas de estar en mi casa me dijo: Tío, serénate, ¡que tú lo que quieres es meterme mano!
En los últimos cuatro años, probablemente habré usado la palabra "camada" en tres o cuatro ocasiones de manera verbal. Por escrito, sin temor a equivocarme, creo que sólo la he utilizado en los últimos diez años en el post de ayer.
Hoy entro en mi correo electrónico, también propiedad de la empresa que aloja este blog, y observo, no sin estupor, que me sugiere visitar la siguiente página web:
Tener hijos e hijas es precioso. Yo que además vengo de una familia muy numerosa, más lo valoro. Sentirte parte de la camada es algo muy enervante; sobre todo si formas parte de los tramos finales de la familia. No existe, aunque lo vives, un sentido identitario. Es siempre lo que te salva. Si no, todos seríamos iguales.
Tener hijos e hijas es ver cómo crecen, cómo se desarrollan, cómo articulan lo que haces y no lo que dices, cómo muestran su amor de una manera absolutamente biológica que tú te encargas de fomentar, intentando hacer bueno ese proverbio que una vez leí a García Márquez, según el cual el cariño lo da el roce y no la sangre.
Pero tener hijos e hijas es también sentir sus lágrimas porque pierden un partido de fútbol o baloncesto, o porque tú no te enteras de lo que quieren decirte, o porque un amigo le ha robado su libro favorito, o porque ha perdido su muñeca, que seguramente se habrá dejado olvidada,
Tener hijas e hijos es una responsabilidad que, absurdamente, nace de un momento de placer.
Habitualmente, aunque me gustan, suelo aborrecer las tragedias. Nunca me ha satisfecho hacer de cada hoyo una trinchera - aunque lo haya hecho y lo haga -, sino que prefiero arenar una duna por la que, llegado el caso, poder rodar.
En un par de días se celebra - y retengamos esto - el primer aniversario del que se ha dado en llamar Movimiento del 15M. El año pasado, durante varias semanas, asistimos a algo que se consideró un halo de luz dentro de un oscuro túnel y que al final acabó dándole la mayoría absoluta a la derecha en este país.
Ahora es fácil decirlo, pero siempre miré ese movimiento con un cierto desdén. La recuperación de un supuesto mayo del 68 que nadie había conocido me parecía altamente sospechosa. Esos chicos, esas chicas tan excelsas, era todo demasiado perfecto para ser realidad cuando uno se ha rozado mínimamente con el ganado humano.
Hoy, mientras se manifiestan con gran alharaca, mientras gritan desaforadamente que todos y todas queremos la luna, los ordenadores de los bancos con los que operan cargarán el importe de la mensualidad de la hipoteca o del alquiler de las viviendas en que residen, se tomarán una cerveza tras el fin de la manifa, el metro exigirá el billete magnético de todos los días.
Creo que antes de reconstruir hay que deconstruir.
Si tenéis ebooks, lectores de libros, programitas instalados en los ordenadores y tabletas, pero, sobre todo, lo más importante, si os gusta leer, estas páginas dan una cierta vidilla.
Lastima, bandoneón, mi corazón tu ronca maldición maleva... Tu lágrima de ron me lleva hasta el hondo bajo fondo donde el barro se subleva. ¡Ya sé, no me digás! ¡Tenés razón! La vida es una herida absurda, y es todo tan fugaz que es una curda, ¡nada más! mi confesión.
Contame tu condena, decime tu fracaso, ¿no ves la pena que me ha herido? Y habláme simplemente de aquel amor ausente tras un retazo del olvido. ¡Ya sé que te lastimo! ¡Ya se que te hago daño llorando mi sermón de vino!
Pero es el viejo amor que tiembla, bandoneón, y busca en el licor que aturde, la curda que al final termine la función corriéndole un telón al corazón. Un poco de recuerdo y sinsabor gotea tu rezongo lerdo. Marea tu licor y arrea la tropilla de la zurda al volcar la última curda. Cerrame el ventanal que arrastra el sol su lento caracol de sueño, ¿no ves que vengo de un país que está de olvido, siempre gris, tras el alcohol?...
Hoy, que tanto y por tan variopintas razones se dispara contra la inmigración y contra las personas inmigrantes, es buena idea echar una mirada atrás y jugar con los mismos lugares comunes. La emigración española.
En la actualidad, nos venden la moto - y tenemos una suicida tendencia a creérnoslo - de que la emigración española fue - empleo queriendo y con consistencia el pasado - un modelo de flujo migratorio: todo el mundo con su contrato, con su lugar de acogida, con sus derechos salvaguardados.
Y no. Esta noticia lo refleja de manera muy gráfica:
Pero siendo esta noticia muy visible (realmente, es muy publicitada), hoy quiero dejar constancia de un trabajo, ya con algunos años, en el que se pone de manifiesto la realidad de la emigración española.
En ese trabajo uno encuentra afirmaciones probadas como las siguientes: La emigración clandestina española en Bélgica sigue aumentando de un modo alarmante, ya que un sesenta por ciento al menos de nuestros compatriotas que llegan a este país, viene al margen del Convenio hispano-Belga de Emigración.
O bien: De manera que se estima que en Alemania, entre 1960 y 1973, en algunos años la emigración irregular (española) superó el cincuenta por ciento y en general nunca bajó del treinta por ciento.
Aún más: El resultado era que, tanto desde el lado de la oferta como del de la demanda, se vulneraban los mecanismos establecidos y se emigraba al margen de ellos. Es decir, que los empresarios de los países de acogida sorteaban estos mecanismos y reclutaban buscando fórmulas más directas, al objeto de ajustar lo más rápidamente posible la mano de obra inmigrada a sus necesidades de producción.
Redujo a segunda y paró en el semáforo
en rojo. Allí estaba. Iba a cruzar por el paso de peatones.
Llevaba años siendo
engañado. Petra lo engañaba con otro. Estaba seguro. Ella se
empeñaba en que siguiera yendo al psiquiatra. ¿Para qué? El estaba
a gusto con sus relojes; arreglándolos, poniéndoles ese tornillo
que faltaba; su tictac le daba cuerda a él en la soledad de su
escritorio. Es bonito arreglar relojes.
El peatón del semáforo
se pone en verde. El peatón de verdad cruza. Un pitido rítmico surge del semáforo.
Me pone los cuernos. Sé
que me los pone con él. Me lo dice mi ombligo. Mi ombligo no falla.
Siempre me avisa; siempre me dice la verdad. Me imagino que está
con él cuando yo cuido y mimo a mis relojes. Esta se cree que me
puede engañar. Yo sé que se acuestan juntos.
Está en la mitad del
paso de cebra. Tiene que ser ahora. Así descansará. Todos descansarán.
Tiene claro que el
colegio es el sitio en el que se ven. No sabe por qué. Ella es
maestra, pero él no; él trabaja como albañil. Algo en su interior, su ombligo, es el que se
lo dice. Piensa que los colegios son sitios de putas. Lo piensa no:
lo sabe. No deja de preguntarse por qué tarda tanto todos los días.
Mete primera y acelera.
Siente el impacto del coche contra el cuerpo. Escucha el golpe del
cuerpo contra la pared.
Se creía este cabrón
que me ponía los cuernos sin yo enterarme. Mi ombligo me avisó, so
gilipollas. Al final eres tan tonto como los demás. Te puede un
coño, gilipollas. Mis relojes no fallan, idiota. Son mejores que tú.
Puso el coche en punto
muerto, que empezó a deslizarse suavemente por la pendiente, hasta llegar a la pared, cerca del cadáver, y se
echó a llorar mientras llegaban los primeros policías.
El ministro De Guindos (ojo, nótese que pongo la partícula de su apellido en mayúscula para que no sea el ministro de Guindos, cartera ésta aún por descubrir y que podría confundirse con la de Agricultura... o con la inexistente de Ciudadanía, claro) nos alegra la tarde con unas declaraciones dignas de la mejor ex ministra Salgado: Ve "rayos de esperanza" en las previsiones para 2013.
¡Pero qué manía de vender la piel de oso antes de cazarlo! (esto es un guiño, que no un guindo, al monarca del Reino de España). No queremos rayos de esperanza. Al igual que cuando nacían los supuestos brotes verdes, lo que queríamos es que nos contaran cuando germinaban, ahora lo que queremos - y esperemos que también sus votantes - no son rayos de esperanza: Queremos tener esperanza. Los rayos o para las tormentas, o para los dioses.
Algún día se prohibirán las hemerotecas (sería un gran argumento para una película futurista) Mientras tanto, para esta esperanza, coloquemos pararrayos.
Souad Massi es una cantante argelina, que reside en Francia, como tantos otros de sus compatriotas que no tienen la suerte de tener una voz como la suya. Tampoco sé qué ocurriría en el caso de que la tuvieran; si hubieran o no prosperado.
Lo cierto es que, como decía, tiene una maravillosa voz y relata historias muy bonitas en sus canciones. esta, en concreto, trata de una tradición en el mundo árabe (valiente tontería acabo de escribir; la tradición oral es frecuente, con más o menos intensidad, en todos los lugares del mundo). Como he instalado unas fuentes en árabe, me permito poner el original - que no he traducido yo, obviamente - por si hubiere mejores traducciones.
سعاد ماسي - راوي
يا راوي حكي حكاية
مادابك تكون رواية حكي لي على ناس الزمان حكي لي على ألف ليلة وليلة وعلى لنجة بنت الغولة وعلى ولد السلطان حانجيتك مانجيتك دنا بعيد من هادي دنيا حاجيتك ماجيتك كل واحد منا في قلبه حكاية
حكي وانسى بلي احنا كبار في بالك رانا صغار حكي لنا على الجنة حكي لنا على النار على طير عمره ما طار فهمنا معانى الدنيا
يا راوي حكي كما حكوا لك ما تزيد ما نقص من عندك كاين نشفوا على بالك حكي لنسينا في هاد زمان خلينا في كان يا ما كان