Investigando una cosa radicalmente diferente me encuentro con una noticia de hace un mes que me había pasado desapercibida: Un senegalés intenta hacerse pasar por blanco ante la Guardia Civil. La noticia tiene bastante mala leche (ainnns, la blanca leche....), porque en realidad lo que ocurrió fue que el africano era portador de un carnet de conducir robado a un abuelo español de ochenta y tres años, y como carecía de habilitación para conducir, fue el documento que entregó al representante de la Benémerita Institución que tuvo a bien requerirle para que la exhibiera (la habilitación para conducir, me refiero).
Me recordó esta situación a algo bastante más complejo y elaborado cuya lectura recomiendo. Escupiré sobre vuestra tumba es una irrespirable novela de Boris Vian en la que el protagonista es un marrón de color blanco (rosáceo, más acertadamente) y cuyo único objetivo es vengar la muerte de su hermano, que murió linchado por acostarse con una wasp. Una blanca, para entendernos.
Es una obra muy violenta que estuvo prohibida por pornográfica. Se ve que palizas las que sean, ahora, sexo, poquito. El pobre Vian, que era un sensible intérprete de jazz, fue condenado por ultraje a la moral y las buenas costumbres.
Lo curioso de todo esto, por qué será, es que es siempre el marrón el que quiere ser rosa y nunca al revés. ¿Nos lo creemos?
No hay comentarios:
Publicar un comentario